Anunció la muerte de un joven producto de un disparo en su departamento y resulta que estaba vivo. Resultado: el medio la despidió sin misericordia.
Eso sucedió en Francia, pero recuerdo el caso de una colega de televisión que durante su transmisión en vivo anunció la muerte de un piloto tras chocar su avioneta contra unas casas en Pavas. A los minutos lo resucitó y segundos después lo volvió a dar por muerto. ¿Se imaginan la angustia de sus familiares mientras veían la noticia?
A esta colega nacional no la despidieron, tampoco ofreció disculpas por su imprudencia y falta de reporteo. A la francesa sí, sin mayor reparo, a pesar de que pidió disculpas públicas.
Hilando más delgado, hay diarios donde no solo dan por muerta a la gente sino que además "nos hacen el favor" de mostrarnos explícitamente, con todas las fotos posibles, cómo murieron.
En el campo de la política y los sucesos también hay quienes dan por culpables a personas que aún no han sido juzgadas.
¿Esto también merecería despidos?
No estamos exentos de cometer errores pero debemos procurar ser más precisos en nuestro reporteo, buscar el balance informativo y verificar los datos antes de lanzarnos a transmitir una noticia solo porque queremos "ser los primeros".
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